miércoles, 6 de junio de 2012

TU AMISTAD


Dedicado a Rachel

El presente relato se inspira, como la gran mayoría, en experiencias o vivencias reales, aunque la confirmación o no de cuanto en él se cuenta depende de sus dos protagonistas, solo ellos saben cuánto de verdad o de mentira se contiene.

Ya hacía tiempo que se habían encontrado, navegando por internet, en foros de contactos. Habían congeniado, siempre que coincidían era un placer para los dos y lo celebraban, lo pasaban bien, se reían, vacilaban, se contaban parte de sus vidas (solo las que cada uno de ellos querían dar a conocer), y además se excitaban, mucho y bien. Ella y él no se cortaban, parecía como si se conocieran de toda la vida, la intimidad de un teclado y una pantalla les permitía decir cosas que igual en otras condiciones no se atreverían a decir. Sus ratos felices iban subiendo de tono, sus conversaciones cada vez eran más sensuales, las provocaciones eran constantes, las indirectas cada vez más directas. Y así, hasta que un día ya no hubo vuelta atrás: ella y él decidieron que había llegado el momento de tocarse, de verse, de besarse, de abrazarse y de todo lo demás que cualquier lector avispado estará imaginando, pero que para ellos era solo la consecuencia lógica de todo lo demás. Por supuesto que querían sexo, mucho y bueno, pero porque primero habían dado todos los pasos para que ese encuentro fuera plenamente feliz.
Él pensaba, es curioso, no la conozco y me excita más que todas las mujeres con las que he estado, me da lo mismo si es rubia, morena o pelirroja, flaca o gorda, vieja o joven, porque guapa lo va a ser seguro, no importa su apariencia física, es ocurrente, simpática, vacilona, valiente, en todo caso va a ser guapa.
Ella estaba muy excitada, porque él no parecía uno más, al contrario era alguien especial, había tocado su fibra sensible, le transmitía seguridad y le excitaba como pocos antes lo habían hecho.
Así, pareció algo natural que concretasen una cita, a ninguno de los dos le pareció algo extraño, sino todo lo contrario, fluyó con una normalidad extraordinaria. Y él se encargó de buscar el sitio idóneo para esa cita; y claro, como era de prever, acertó plenamente, encontró un lugar precioso, en el que le prometió a ella que buscarían su momento de felicidad.
Sin embargo, poco antes de la fecha señalada, él canceló la cita. No se atrevió a dar ese paso y traicionar de ese modo a quien justo en esos días volvía a aparecer por su vida después de una temporada perdida, quería dedicarse a recuperar el amor de su vida y por ello no quería hacer nada que pudiera interferir en sus sentimientos y, una noche con ella, aunque solo hubiera sexo, sí que interferiría en esos sentimientos, un poco confusos ya en aquel momento.

Ella, cuando lo supo, no tuvo ni una sola queja, aunque le dolió la decisión de él, no fue capaz de decirle ni una sola palabra de desaprobación. Le quería como a un verdadero amigo y respetó su decisión, incluso le animó (y lo hizo con sinceridad y autenticidad). Su reacción fue elegante, pero no porque ella buscase que fuera elegante, sino porque ella es profundamente elegante, va con ella, la más auténtica y coherente de las mujeres que él haya conocido.
Hoy, tiempo después, siguen siendo amigos, aunque ya casi no coinciden. Pero, de vez en cuando, ella se acuerda de él; y él se acuerda de ella. Y siempre, siempre, con una sonrisa en la boca

POR DON QUIJOTE

2 comentarios:

Rachel dijo...

Muchas gracias Don_Quijote, la amistad no la he valorado nunca por el número de copas que me tomo con alguien, la amistad es algo que surge y se cuida, no se fuerza ni se acota.
El relato sólo tú y yo sabemos si es verdad o no, pero sólo puedo decir una cosa y tú lo sabes bien, nuestro destino lo marcamos con los pequeños detalles que te hacen elegir el camino apropiado, ese camino que en el futuro te dirá ¡qué bien hice! Me alegro mucho que nuestros caminos se juntasen en un momento de la vida porque eres una persona que sabe valorar los detalles que para mí son importantes.

Anónimo dijo...

Con tu comentario has conseguido potenciar el relato, ahora ya sí que es nuestro, de los dos, tú lo has inspirado y tú lo has rematado; como siempre, genial. Y sí, efectivamente, aunque éste es un blog de sexo, en este caso haremos una excepción y hablaremos de amigos (la amistad, un valor escasamente apreciado por algunos, pero tan necesario ...).
Quijote